La sexta visita de observación in loco de la CIDH a Perú que desarrolló entre el 9 y el 13 de noviembre de 1998, incluyó reuniones con autoridades gubernamentales, departamentales y locales, así como con representantes de la sociedad civil, en Lima, Ayacucho, Tacna, Puno y Arequipa. Entre los problemas identificados en el comunicado de prensa emitido al finalizar la visita se destacan los relativos a la vigencia del Estado democrático y constitucional de derecho: provisionalidad de jueces y fiscales; desarticulación del Tribunal Constitucional; falta de respeto a las normas de debido proceso; expansión de la justicia militar; impunidad de crímenes contra los derechos humanos; así como las violaciones del derecho a la libertad de expresión y los derechos políticos. La Comisión Interamericana recibió igualmente numerosas peticiones individuales sobre distintos temas, que incluyen la situación de las personas privadas de libertad; los derechos de trabajadores jubilados y despedidos; la situación de las mujeres, niñas, niños y adolescentes y pueblos indígenas; la esterilización forzada y las denuncias de violaciones y abusos cometidos por los llamados comités de autodefensa.  Entre los aspectos positivos, el comunicado destaca “un incremento en la conciencia y en la preocupación por los derechos humanos en el país, que es compartida por sectores importantes de la opinión pública” y la presencia de creciente actividad de la sociedad civil.